Bonitas/os y queridos peludos, de una forma u otra (más alegre o más triste) ya no estáis entre nosotros. La mayoría vivís felizmente adoptados con familias que os valoran, os quieren y a las que estáis haciendo muy felices. Otros nos esperáis junto al arcoiris porque vuestro tránsito por este mundo se ha acabado ya. A unos y a otros no os olvidamos, no os olvidaremos. En nuestro corazón hay un hueco muy importante en el que todos vosotros habéis dejado un trocito de vida que es nuestro mayor tesoro. Os agradecemos el habernos permitido convivir con vosotros y haber disfrutado de vuestro amor y vuestra lealtad. Siempre os querremos.
Comentarios
No hay comentarios.