Llegó muy fastidiado, hambriento, famélico, lleno de miseria, enfermo…. Creíamos que no lo sacábamos adelante de lo mal que llegó. Pero tiene tantas ganas de vivir, tantas ganas de disfrutar de nuestra compañía, tantas ganas de compartir con sus amigos peludos, que remontó y remontó y se esta convirtiendo en un precioso y simpatiquísimo compañero de cualquier tipo de actividad. Su sordera no remite todavía del todo, pero el veterinario confía en que también mejorará. Calculamos que nació en enero de 2011 y de verdad merece la pena conocer a amigos como este.
Comentarios
No hay comentarios.