A esta miniatura le encontraron bajo un coche, acurrucado y muerto de hambre y sed y de miedo. Tardó poco en habituarse a nosotros, aunque su tamaño y su carácter tranquilo hacen que los peludos jóvenes le hayan perdido un poco el respeto. Es mimoso, curioso, cariñoso, obediente, tranquilo y adora dar paseos. Como no es ya joven, sería una gran compañía en casa.
no se han encontrado imágenes
Comentarios
No hay comentarios.